Una retadora que habita en todo ciclista y pone un sazón especial a nuestros entrenamientos. Esa frase de esencia muy mexicana que nos desafía a dar más de lo que creemos posible. De ahí nace nuestra marca, de una constante exigencia de ser mejores atletas, de ser más rápidos, de llegar más lejos, de demostrarnos a nosotros mismos que los límites no están escritos y que las metas se reajustan a medida que nos volvemos más fuertes y nos inspiramos.
Esto nos llevó a diseñar la indumentaria que nos acompaña en cada entrenamiento, porque el estilo inspira, y la inspiración es lo más importante en el proceso de lograr grandes cosas. Y estamos en ese proceso contigo, sudando, sufriendo, disfrutando, saboreando el dolor en cada pedaleada.
Gracias por darnos un lugar en tu guardarropa, por elegirnos para rodar con estilo, por hacernos parte de lo que disfrutas día a día.